Hablemos de razas: Border Collie
Hoy hablamos de uno de los perros considerados entre los más inteligentes por su comprensión de las órdenes humanas -no le hacen falta más de 5 repeticiones para captar la idea-, y porque suelen obedecer a la primera el 95% de las veces.
El Border Collie tiene su origen en las regiones de Escocia e Inglaterra. Hay pistas que indican que desde el siglo V a.C. se utilizaba esta raza con el fin de pastorear durante días en los terrenos más duros.
A principios del siglo XX se constituyó la International Sheep Dog Society que organizaba concursos de pastoreo empezando a registrar a los ejemplares de Border Collie. Dichos registros se realizaban teniendo en cuenta características fundamentales como la capacidad para el trabajo y la predisposición para conducir rebaños; también eran importantes, aunque supeditadas a las anteriores, la resistencia física y la agilidad. A partir de este hecho se considería al perro Border Collie como el ejemplar más eficaz para el pastoreo, hoy en día es considerado el perro pastor por antonomasia.
Es un perro de talla mediana, bien proporcionado, que puede pesar entre 16 y 23 kg. Tiene un cuerpo atlético, de pecho bajo, fuerte y ágil.
El pelaje de estos perros tiene que ser cepillado dos o tres veces por semana, ya que tiende a enredarse con facilidad. Además, estos perros pierden pelo regularmente, por lo que no son adecuados para personas alérgicas. No es necesario ni bueno bañarlos con mucha frecuencia, sino solamente cuando están sucios.
En su carácter predomina la lealtad, la inteligencia y una capacidad de concentración poco común en el resto de razas. Su marcado instinto de pastoreo, sumado a su tenacidad y resistencia, lo coloca entre las razas más requeridas para reunir, controlar y conducir los rebaños, resultando la mejor raza de perro pastor existente. Posee una gran agilidad y es dueño de una inteligencia extrema, tanto funcional como de obediencia.
Es un perro no apto para personas sedentarias, ya que esta raza contiene una gran cantidad de energía y requiere de una gran cantidad de ejercicio para mantener su estado tranquilo y su mente equilibrada. Suelen ser perros despiertos, vigilantes. Son cariñosos y dóciles, sociables con las personas y otros animales.
Si no realizan ejercicio suficiente o se les mantiene encerrados por un tiempo prolongado pueden llegar a desarrollar comportamientos neuróticos.